domingo, abril 17, 2011

Imagen: Puente de J.B. Justo sobre Avda Córdoba. Buenos Aires. Sábado. // Osea

viernes, abril 15, 2011

Mientras en el caso del artista chino desaparecido Ai Weiwei, diarios oficialistas chinos hablan de resistir las presiones "del Oeste", que critican la "progresiva justicia socialista", ¡¡el abogado que estaba dispuesto a defenderlo fue secuestrado ayer!!, luego de twitear: "me sigue gente que identifico". O sea, policías de civil. Junto a él (su nombre es Liu Xiaoyuan), también fue detenido y se encuentra en un destino indeterminado Liu Zhenggang, un diseñador que trabaja en Fake, la empresa que maneja las exposiciones, obra y proyectos arquitectónicos de Weiwei. Resumen: las autoridades mantienen bajo su poder a cinco personas relacionadas con él. En lo que parece ser una norma de la "justicia socialista": la policía NO HA NOTIFICADO que estén detenidos, con lo cual se encuentran técnicamente desaparecidos, lo cual no se sabe si corresponde a una norma heredada de la fase totalitaria del PC chino o se trata de una técnica (ya clásica, por otro lado, no importa si en Oriente u Occidente, Norte o Sur) de intimidación social que busca y consigue crear miedo en la población, al mostrar la disposición y uso de un poder arbitario e inconstestable que, por un lado niega tal calidad, pero deja pistas evidentes de su condición. // El mal

jueves, abril 14, 2011

Como alguna vez dijo Marshall McLuhan: Los genios suelen dar en el clavo, pero no siempre en la cabeza. Quizás es lo que le ocurrió a George Orwell y su novela distóptica (no, distópico no es un tipo de jarabe, sino una utopía mala onda o, como en Un Mundo Feliz, una que solo parece buena) 1984, pues si bien el Reino Unido actual está saturado de cámaras Little Big Brother y el gobierno conservador está decidido a acabar con esa inutilidad: las bibliotecas públicas, las libertades civiles siguen en pie. Signo de los tiempos, sin embargo, Haruki Murakami –el novelista japonés autor de El pájaro que da cuerda al mundo– escribió hace una nada, su propio 1984. Ahora, cruzando apenas una lengua oceánica, y caminando unos kilómetros adentro de la costa china, un gobierno que únicamente dice desear la paz y el bien de sus habitantes y de los de todo el mundo, mantiene detenido a un artista sin derecho a habeas corpus (o sea, a que alguien vea dónde está y si siguen todas sus partes corporales unidas) y parte de la gente que trabaja con él, por muchos días. Luego de una campaña en que se le acusa de todas esas infamias que tan bien calzan con el prejuicio del artista como criminal apenas encubierto (sexualidad desviada, estafa a conciencia, anarquismo personal, desverguenza, vanidad, orgullo rebelde), comienza el segundo acto de la farsa: la confesión. "A medida que la investigación se profundiza, las autoridades públicas de seguridad acumulan testigos muy sólidos, documentación y evidencia circunstancial y el mismo Ai Weiwei ha tenido una muy buena actitud cooperando con la investigación y ha comenzado a confesar". La cita proviene de un diario de Hong Kong bajo control del gobierno dictatorial de Pekín. Y posee ecos ominosos (que es una la palabra "prima" que mira al futuro, de tenebroso) de las que anticiparon el destierro o la muerte de tantos artistas en los gulags stalinianos, los campos de reeducación franquistas y varias dictaduras de la patria grande latinoamericana. Historia Universal de la Infamia: Acorde con su mayor poder, China quiere aumentar su protagonismo en ella

domingo, abril 10, 2011

El artista chino Ai Weiwei (arriba) sigue "desaparecido" a la manera china: las autoridades lo arrestaron hace cerca de una semana y no entregan su paradero, ni sus estado de salud: En lo que ya es una técnica clásica de los regímenes dictatoriales, medios controlados por el gobierno han comenzado a informar que se le investiga por crímenes económicos, mientras que también se le acusa de haber robado algunas de las ideas de sus instalaciones. Es decir, el artista "rebelde" comienza a ser transformado en un "delincuente" común. En paralelo, hay sugerencias de obscenidad: Se sugiere que una fotografía de él mismo desnudo, con un caballo de juguete tapándole los genitales (lo cual en China tendría el doble sentido de "a la mierda con el Politburó del PC") habría sido la gota que derramó el vaso de la tolerancia con un individuo disfuncial y destructivo, atrapado por su vanidad y codicia. ¿Algún parecido con la persecución de los artistas de la vanguardia rusa con el arribo de Stalin al poder? La verdad, esa chica siempre tan sofisticada, parece ser una muy distinta: lejos de preocupar al régimen de partido único con sus genialidades o sus boutades artísticas, Ai Weiwei estaría siendo castigado por su apoyo y participación en las investigaciones de al menos dos casos de corrupción que derivaron en la muerte de decenas de niños y trabajadores pobres: el derrumbe de las escuelas en una ciudad del interior, durante un terremoto ocurrido hace cuatro años (los edificios estaban mal construidos y al menos un par de los padres y un profesor han sido arrestados y encarcelados por impulsar un castigo a los funcionarios corruptos que permitieron que las empresas constructoras violaran los códigos coimenando a miembros de Partido Comunista), y un incendio que derivó en la muerte de 57 inmigrantes internos.
Imagen de arriba: Estudio de perspectiva con Mona Lisa. Es parte de una serie en la cual el brazo de Ai Weiwei haciendo el gesto de ¡fuck you! apunta íconos de la cultura y el poder: La Casa Blanca, la Torre Eiffel, etc.


El viejo truco del "artista, malo, malo, malo, malo"

jueves, abril 07, 2011




Esta versión de Alicia en el país de las Maravillas la encontramos gracias al blog del amigo de Blojeans, El Economista Marginal (sí, los economistas están tan locos como el Sombrero Loco, sólo que no lo saben, ya que confunden prestigio y ganancias con salud, del mismo modo en que lo hacían los dueños de gladiadores en el Imperio Romano o los fabricantes de armas hoy en día). Dura nueve minutos y posee todos los tics del vodevil animado de 1903. Vale la pena verlo para llegar a la escena final, dónde Alicia, con un sólo gesto, anticipa todo el humor de Chaplin, Buster Keaton y los Keyston Cops.


Alicia se calla la boca, pero es puro movimiento

domingo, abril 03, 2011

Es una nación alguna vez famosa por sus enjambres de bicicletas, pero no por sus pintores de óleos (o sea, no es Holanda), dónde los hospitales psiquiátricos diganostican un mal que no se observa en ninguna otra región del mundo: Presentacionitis quejosa, esto es, se encierra allí a personas comunes y corrientes consideradas mentalmente inestables por protestar demasiado, por escrito, respecto de temas vecinales y urbanos (para "curarlos" se les aplican drogas y electroschoks). En ese lugar, las autoridades pueden prohibir, sólo ante si, que una persona no salga a la calle simplemente por ser pariente de alguien y que las ventanillas de los trenes estén cubiertas para que los pasajeros no vean cosas "desagradables" a su paso por ciertos territorios. No se trata de un país arruinado y al borde del colapso, al contrario se celebra su poder y riqueza crecientes y de los cuatro rincones del globo acuden, presurosos, empresarios a ofrecer negocios y estudiantes a aprender su lenguaje tonal. Todos ellos se admiran de los fastos y el poder, la gracia y la amplitud de la ambición que sus ciudadanos rezuman. Al hacerlo olvidan un detalle: todo ocurre bajo la campana gaseosa de una dictadura. A los naturales no les extraña: bajo diversas pieles el gobierno de unos pocos (que responden sólo y, a veces, ni eso) ante sus iguales) sobre los muchos ha sido su manera de estar desde hace siglos. Irónicamente, a "los pocos" les irrita, les enloquece, cuando uno de los muchos actúa como ellos, respondiendo sólo ante sí. Como en una mala película épica, la rabieta los domina si éste es un artista. O sea, alguien que crea mundos y formas movido no por el ansia de dinero o fama, sino porque simplemente no puede ni quiere dejar de hacerlo. ------------------------------------------------------------------------------------------------ Ai Weiwei fue detenido ayer y su estudio al norte de Pekín allanado por policías de uniforme y civil, quienes detuvieron a su pareja y ocho ayudantes. No sólo alejaron a los periodistas presentes y borraron las imágenes de los hechos, sino que cortaron la luz del barrio entero antes de hacerlo. Parte de los ayudantes fue liberada más tarde, pero el artista y su mujer permanecen detenidos en un lugar desconocido. ¿Qué delitos habría cometido el artista? Simplemente comentar que ha sido detenido y golpeado por la policía dos veces, que los post de su blog son censurados por una autoridad sin rostro (igual que los comentarios) y que planeaba vivir medio año en Alemania y medio en China; todo esto sin pedir permiso a las autoridades, las que lo habían amenazado en cuanto a que no intentase salir de su país para residir en otro. Arriba: Ai Weiwei

Arriba: Dragón.




Abajo: Recreación de la célebre torre diseñada por el artista soviético Vladimir Tatlin.


Enemigo artístico Nº 1

sábado, abril 02, 2011

Quien hereda no roba. O, mejor dicho, como en un pootlach invertido: al quitar, multiplica sin empobrecer al esquilmado. Al contrario: lo prosperiza, sea el padre, la madre, la cultura, en fin, todas aquellas formas de recreación que son eso que llamamos linaje. Nina Kovensky, la jovencisísima de los KCreadores, con sus collages de imágenes realizadas por medio de una cámara de fotos analógicas, es un ejemplo de ello. Como en todo artista nuevo se nota la ternura y, a la vez, desenfado con que trata las posibilidades que le dan sus herramientas. Y eso, siempre, o casi, es como una remake de la mañana del mundo.





Artista en status nascendi agarra vuelo