lunes, octubre 13, 2008

La Chica con frazada (arriba) es Henrietta Moraes, modelo y enamorada de Lucian Freud en 1952. Podemos considerarla nuestro mascarón de proa de la exposición "Lucian Freud, Early Works / 1940-1958", que se expone estos días y hasta diciembre próximo en la galería Hazlitt Holland-Hibbert (http://www.hh-h.com/) en Londres.
Un estilo propio es como un río con personalidad: todos los ríos se parecen, pero los que tienen personalidad hacen que su nombre designe a una entidad identificable como si fuera un "alguien". El trabajo de Freud tiene tal cualidad, lo hace sentir a uno que la pintura sería otra cosa, una "menos otra cosa" si él no hubiera creado su obra. En Man with Arms Folded, 1944, (arriba) Michael Wishart, de 16 años, impresiona. Hijo de Lorna Wishart, amiga de Freud, éste logra captar esa mezcla de seriedad sin seriedad y de femineidad con fascinación (o rechazo) de la femineidad de los hombres adolescentes.
Y, bueno, claro, la fiesta. Girl in a Dark Jacket, 1947 (la modelo es Kitty Garman, sobrina de Lorna Wishart) aparece la ferocidad encantadora del hombre que ha reinventado el retrato, quitándole todo manierismo.
El joven Freud es su propio modelo en Man at Night (Self-portrait), 1947-48, Pen, ink and conté. La reseña de Guardian sobre la expo entrega una anécdota de esas que muestran que
-para cumplir con la leyenda- el artista de joven sufrió sus rechazos: "Although a self-portrait, this drawing is very similar to a sketch of a character named Arvid from a series of Freud's illustrations, submitted to accompany the story Flyda of the Seas, by Princess Marie Bonaparte, a patron of Freud and a prominent psychoanalyst. The illustrations were rejected by the publisher".
Finalmente, tenemos su retrato del poeta Stephen Spender.
"Tu cuerpo son estrellas cuyo millón resplandece aquí:
estoy perdido entre las ramas de este cielo
aquí junto a mi pecho, aquí en las ventanas de mi nariz, aquí
donde yacen nuestros amplios brazos como torrentes de fuego.
¿Cómo puede terminar esto? Mi curación llena la noche
y cuelga sus banderas en mundos a los que no puedo acercarme.
Nuestros movimientos abarcan millas, y cuando nos besamos
el momento se ensancha para circundar los años".
(Fragmento del Poema 25 de Preludios, de Stephen Spender, en traducción de William Shand y Alberto Guirri).
El coraje tranquilo del pintar

4 Comentarios:

Anonymous Anónimo dijo...

como pueden las palabras juntarse de forma tal que se sienten físicas?

4:21 p. m.  
Anonymous Anónimo dijo...

es que lo bello es lo bueno, las ideas son la luz, y las palabras (aunque no las quiero mucho)nos surcan el sentimiento como una estrella fugaz en la noche despejada de luna nueva

6:31 p. m.  
Blogger R101 dijo...

"Solo en el reino de la ficción hallamos aquella pluralidad de vidas que nos es precisa". S. Freud.

8:57 p. m.  
Blogger R101 dijo...

"Snow is a strange white word". Isaac Rosenberg

9:03 p. m.  

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