el mundo iba a cambiar con hippies y graffitis por la paz
ella militaba en el P.C, y él, con su guitarra iba a cantar
contra De Gaulle, en el café de techos bajos de Monmartre,
sin pensar que una marcha a la Sorbona,
en Champs Elysees, iba a lograr que ella hable con él
y que él la bese fuerte sin dudar como actuar...
con Lennon y Sartre sueltos en París
él se fue con la promesa de volverla a ver con el atardecer...
No la volvió a ver,
ella corrió hacia el Este sin mirar hacia atrás...
Para perder la primavera en Praga,
Para perder la primavera en Praga,
para ver y entender que sólo estuvo viva allá en París junto a él.
Después murió en Siberia, sin llegar a ver el sol caer junto a él
Firmó un contrato en Londres y en Madrid para ser otra estrellita con una remera del Che.
Amor y decepción de hoy, de ayer. Amor y decepción francés... en francés".
Bueno, al igual que el amor, la revolución -como tituló Andrés Rivera- es un sueño eterno. Basta con ver ese luciferito (arriba) que escuchaba L´amour Et L´déception (así se llama el tema) con sus cuernitos alertas, para intuirlo.
El vídeo (con sonido mono total) : http://www.youtube.com/watch?v=nlfU0FZcUEo
El sol también se levanta (una y otra vez)
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