Octopush. Ahora, el Dolphinpush

Esta foto se la saqué al newsblog de The Guardian y muestra el último campeonato de hockey subacuático ¡¡alpino!! (octopush) que se jugó hace nada en Eslovenia y ganó un equipo francés. Si lo hacen en un acuario lo suficientemente grande y yo estoy AFUERA de él, me gustaría ver un partido de Dolphinpush. O sea polo con delfines. Que raro que algún guionista de Aquaman no lo haya inventado.

Aparición en una taza: ¿Filósofo o verdulero?

Cuándo será ese cuándo

Rosas bajo la nieve en Frankfurt, ayer. Foto tomada por Michael Probst/AP

Cuándo será ese cuándo

Quand refleuriront les lilas blancs?

(¿Cuándo volverán a florecer las lilas blancas?

o las blancas lilas, si la cursilería se consiente).

Desde hace muchos años la aduana de la poesía

detuvo en su frontera a esta frase.

La cuota de rosas, lilas, margaritas y otras flores inmigrantes

está, siglos ha, en esta república, más que completa.

Pero hoy, para sorpresa de todos, su pasaporte fue sellado.

Y es porque,

un mamut,

solitario tilde

en la hoja alba/nácar/alba del invierno que se alarga,

-ausencia de todo rastro de habla en el estornudo de un mundo-;

por un segundo,

con su boca salivando por el recuerdo,

bajo la tormenta,

deseó:

Quand refleuriront les lilas blancs?

RLS

Ceci nest pas une postal

Una otra de Ariel en el país de los mexicas: sombra estatuaria y hombre ensombrado. Simetrías de curvas y rectas de mano humana, conviviendo con simetrías árboreas y núbeas de esa otra: la mano de dedos repletos de brotes de la naturaleza.

¿Y su resaca es el conservadurismo acorazado?

(De los españoles Reboredo y Sañudo)

Qué mano, qué ojo, qué corazón

Este barco lo podríamos bautizar como el "HMS (Honoravel Majestic Saudade) Leonilson Como Te Queremos."

Adentro hay agua casi hervida

Un trago de tráfago porteño

¿No es increíble?: Estoy mojado

Dibujo de un niño/a californiano

No te pongas tú cielosa

Si bien las nubes no tienen estado, si disponen de patria: miren esta sobre Guanajuato, México; tomada por el grande fotógrafo Ariel Diacovetsky. Plácida pace, masca vapor de agua, lo rumia, y se flota. Tal que, aunque puesta a sus asuntos, saluda a varios viejos conocidos. Enredaderas y árboles quietos. Pietistas del calor.